domingo, 8 de noviembre de 2020

"LA INQUILINA DE WILDFELD HALL", Anne Brontë

 

Tras muchos años de abandono, la ruinosa mansión de Wildfell Hall es habitada de nuevo por una misteriosa mujer y su hijo de corta edad. La nueva inquilina –una viuda, al parecer –no tarda, con su carácter retraído y poco sociable, sus opiniones a menudo radicales y su extraña, triste belleza, en atraer las sospechas de la vecindad, y a la vez la rendida admiración de un joven e impetuoso agricultor. Pero la mujer tiene, en efecto, un pasado... más terrible y tortuoso si cabe de lo que la peor de las murmuraciones es capaz de adivinar. La inquilina de Wildfell Hall (1848), segunda y última novela de Anne Brontë, une al bello relato de un amor prohibido e invernal el retrato intensísimo del fracaso de un matrimonio degradado por el abuso y la violencia, descrito “con una predilección morbosa por lo grosero, cuando no brutal” que escandalizó y repugnó a sus contemporáneos. De hecho, todavía hoy, la dureza, audacia y auténtico rigor de esta novela siguen siendo igual de sorprendentes y desafiantes.

Recientemente he leído a la única hermana Brontë que me faltaba, Anne. He elegido de entre sus dos obras publicadas, la que más me llamaba la atención por su argumento. Lo he hecho después de releer  "Cumbres Borrascosas" de su hermana Emily, que fue una de las primeras novelas adultas que leí en mi preadolescencia (13 ó 14 años) y una de las que más influyeron en mi pasión por la literatura.  De "Cumbres..." debo decir que me acordaba de todo, pese a hacer por lo menos 35 años que no la leía y que me ha impresionado como la primera vez. Eso me ha llevado a querer volver a releer "Jane Eyre" y no aplazar más el encuentro con la menor de las hermanas.

Siempre pensé que el día que leyera a Anne, sería su "Agnes Grey", porque durante mucho tiempo pensé que era su único libro publicado. Pero en cuanto supe de "La inquilina de Wildfeld Hall" me interesó mucho más. Una vez leído, me ha parecido una autora muy diferente de sus hermanas. A mí personalmente me ha gustado menos esta novela que "Cumbres Borrascosas" o "Jane Eyre", pero desde luego hay que reconocer que es una obra muy valiente y sorprendentemente feminista. Anne aborda con crudeza el problema del alcoholismo inspirándose en su propio hermano, Branwell, y describe situaciones muy duras de una manera muy directa y poco habitual para la época en la que fue escrita. La protagonista, Helen Graham, es una mujer independiente, que trabaja para mantenerse a sí misma y a su hijo, y que no consiente que nadie dirija ni cuestione su manera de vivir y de educar a su hijo, sin evitar los enfrentamientos directos si hace falta. En la Inglaterra victoriana, esta personalidad femenina es muy sorprendente y casi desafiante, y lo más sobresaliente del libro junto a varias escenas muy explícitas de maltrato psicológico y que ponen de manifiesto la absoluta falta de derechos de las mujeres de la época. 

Lo que menos me ha gustado, ha sido las continuas citas de la Biblia y el tono moralista que impregna todo el libro, incluso la valiente Helen es a ratos un poco insoportable de tan virtuosa. Y me pareció que el final contenía un exagerado gasto de energía y que podía haberse resuelto de manera más ágil.

Como digo, Anne me ha gustado menos que sus hermanas, pero la sentía bastante eclipsada por las otras dos, y se merecía una oportunidad. Es una lectura muy interesante y recomendable aunque para mí gusto no tenga la calidad de Charlotte o de Emily. Realmente, las tres Brontë son muy diferentes entre sí, pero todas merecen la pena.



lunes, 31 de agosto de 2020

"EXPIACIÓN", Ian McEwan


En la gran casa de campo de la familia Tallis todo parece fluir con apacible elegancia en el día más caluroso del verano de 1935. Pero el oído atento percibirá sutiles notas disonantes, una creciente tensión que estallará después de que Cecilia, la hija mayor de los Tallis, salga empapada de una fuente, vestida solamente con su ropa interior, mientras Robbie, el brillante hijo de la criada y protegido de la familia Tallis, la contempla... Un libro prodigioso, que va abriéndose como un juego de cajas chinas y que contiene muchas novelas: una romántica historia de amor imposible, una durísima narración de guerra y la novela que dentro de la novela escribe uno de los personajes.




Hace mucho tiempo que este libro me llamaba la atención, sin saber cual era su argumento ni haber leído nunca a su autor. Me gustó su título tan contundente, tan directo, que me hablaba de crimen o pecado, de culpa y arrepentimiento.

Lo tuve en las manos varias veces en distintas librerías sin animarme a comprarlo, no por nada, sino porque otros tuvieron más prisa que él en venirse conmigo. Ví también que tuvo su adaptación cinematográfica que no quise ver hasta que no me lo hubiera leído y de la que procuré huir incluso del trailer para no tener información sobre la trama.

Este verano, por fin, me puse con él. Me ha parecido una gran novela, si bien es quizá algo densa y no apta para cualquiera, o no para cualquier momento. Tengo que reconocer que me costó entrar en la historia, pero llegado a un punto, ya no lo pude dejar. La novela es muy descriptiva y consigue sobre todo generar una gran atmósfera, pero es también lenta en cuanto a la acción y continuamente se tiene la sensación de que cada acto se alarga demasiado. Sobre todo en la primera parte, en la que se producen los hechos que supondrán un punto de inflexión en la vida de todos. No obstante, creo que hace una gran descripción de los personajes, de gran complejidad.

 Sobre el argumento, resulta inquietante cómo la culpa por un acto cometido en una noche de infancia se alarga por el resto de la vida y cómo influye en el desarrollo de la existencia de otras personas. Se maneja de manera excelente los sentimientos que puede desvelar un acontecimiento de esas dimensiones: desde la posible maldad e indiferencia de una criatura, pasando por los sueños de desquite o venganza del afectado, hasta la necesidad de expiar la culpa que no deja vivir a quien la asume totalmente.

Si tuviera que destacar algo realmente notable para mí en esta obra, sería el final. La novela está estructurada en tres partes y un epílogo, y es en este último donde hay un giro argumental completamente inesperado que hace uno se plantee toda la historia. Aporta a la historia ya muy dramática, un dramatismo nuevo. Me parece una conclusión muy emocionante y que a mí me dejó con un nudo en la garganta.

Yo doy mucha importancia a la manera de acabar una historia, para mí un mal final puede estropear todo el libro y uno muy bueno puede redimirlo. En este caso, este epílogo me conmovió profundamente y creo que es uno de los mejores finales que he leído.

Afortunadamente, tantos años esperando leerlo con unas expectativas más bien altas, han tenido su recompensa.

Aquí, el trailer de la adaptación al cine, de 2007 que, ahora sí, espero ver:








lunes, 6 de julio de 2020

FRUTAS Y VERDURAS

Cuando dibujo, mi tema favorito son los retratos y la figura humana en general. Es lo que más disfruto por eso me obligo a elegir otros temas de vez en cuando, como disciplina. Lo último ha sido un grupo de frutas y verduras, la ténica, como siempre en los últimos tiempos, lápices de colores. También he utilizado rotuladores de punta fina para algunos detalles.





viernes, 3 de julio de 2020

LIRI

Liri llegó a casa esta semana, después de que dudáramos mucho sobre la conveniencia o no de tener una mascota. Ha sido el fruto de la insistencia de mi hija, amante de de los animales, cuya persistente lucha a favor de incorporar un animalito a la familia ha terminado por vencer nuestras resistencias. 
También hemos tenido debate sobre si preferíamos perro o gato. En ese sentido, ha sido mi preferencia por los felinos la que ha salido vencedora, en parte porque su cuidado recaerá principalmente sobre mi.

Finalmente, después de buscar en protectoras y entre personas conocidas, ha llegado Liri, una maravillosa gatita de dos meses, de pelaje blanco y gris, menudita y con unos enormes ojos llenos de curiosidad y ternura.




Es juguetona y vivaracha, se porta muy bien, es independiente pero capaz también de solicitar afecto y compañía. Como todos los felinos, se mueve con elegancia y es un placer observar sus gráciles movimientos.



Es capaz de pasarse horas jugando con el envoltorio de un caramelo o un tapón de plástico, aunque también tiene inclinación por los cables y estamos intentando adaptarnos a vivir con ella y evitarle los riesgos de un hogar donde hace mucho tiempo que ya sólo viven humanos adultos.




Liri ha llegado para hacer nuestra vida diferente. Más divertida y un poco más generosa. Es increíblemente satisfactorio verla retozar e incluso comer, acariciar su cuerpo menudo de huesos pequeños y frágiles.





Me gusta imaginar cuánto tiempo va a acompañarnos, qué nuevos aprendizajes traerá a nuestras vidas y la diversión y compañía que podemos aportarnos mutuamente. De momento, ha tomado posesión de la biblioteca y le gusta acomodarse en las estanterías y entre los libros, que jamás araña ni muerde.

Empieza una nueva y diferene aventura. Bienvenida, pequeña Liri.


sábado, 13 de junio de 2020

LUIS EDUARDO AUTE "EL NIÑO QUE MIRABA EL MAR"

¿Por qué me parece que la pérdida de cierta generación no tendrá recambio posible?




lunes, 25 de mayo de 2020

SIGO DIBUJANDO

Estoy muy animada a seguir dibujando. He pasado unos años de sequía en este terreno, son tantas las cosas que me gustan, que las aficiones se me atropellan unas a otras y si en algún momento vital abandono alguna, no es porque me encuentre inactiva, sino porque seguramente estoy centrada en otra cosa. También influye la carga de trabajo o las obligaciones familiares, obviamente. Independientemente de la situación de alerta sanitaria, yo ahora estoy disfrutando de mucho más tiempo de ocio que hace unos años, y eso se nota.

Ayer terminé otro dibujo hecho con lápices de colores, un retrato de mi hijo. Tengo que comprar nuevos materiales, pero de momento sigo utilizando lo que tengo en casa. Ni el papel es el mejor para dibujar ni los lápices de colores son los óptimos para ese papel, pero como dibujo para mí tampoco importa demasiado.





Hace unos días compré un libro que llevaba mucho tiempo buscando, "Aprender a dibujar con el lado derecho del cerebro" de Betty Edwards, muy conocido por los dibujantes aficionados y que me ha resultado sumamente interesante. Espero mejorar con las técnicas que propone, desde luego es muy reveladora su lectura, que ayuda a comprender que el dibujo no es simplemente un don sino que es una habilidad que como otras se puede aprender y perfeccionar.



lunes, 18 de mayo de 2020

"TENEMOS QUE HABLAR DE KEVIN", Lionel Shriver





Éste fue el último libro comprado justo antes del confinamiento, y el último que me he leído hasta la fecha, acabado hace unos días pero que aún ronda en mi cabeza, impidiéndome empezar otra lectura.

Es una obra dura, incómoda de leer en algunos momentos, que me ha mantenido no obstante pegada al libro hasta el final. Su desenlace se ofrece al lector desde las primeras páginas, por eso no desvelo nada si digo que trata sobre el tema de las masacres perpetradas por adolescentes en los institutos de los Estados Unidos, esa lacra social increíble, inexplicable y tremenda que asola el país cada cierto (poco) tiempo. Aunque Kevin y su familia son ficticios, resulta demoledor constatar cómo el río de sucesos de este tipo que se mencionan a lo largo de la novela son  tristemente  reales. 

Me ha gustado mucho el libro a pesar de su dureza, Plantea preguntas y reflexiones sobre cuestiones polémicas, como es la educación de los hijos,  el peso del amor, o de la ausencia de éste en la personalidad de los niños, las dudas de la madre antes de decidir tenerlo y sus sentimientos ante un hijo conflictivo . Como no puede ser de otra manera, el medio social está también puesto en cuestión  así como la percepción de los padres sobre su propio país, diametralmente opuesto.

La estructura del libro, de género epistolar, ofrece un desgarrador retrato íntimo de la protagonista, la madre de Kevin, cuya explicación pormenorizada de sus sentimientos lleva irremediablemente a empatizar con ella  pese a que su historia echa por tierra el modelo de feliz familia americana.

He terminado su lectura con el corazón encogido y un sentimiento agudo de desazón. Me acompaña desde entonces y será una lectura imposible de olvidar.