lunes, 18 de mayo de 2020

"TENEMOS QUE HABLAR DE KEVIN", Lionel Shriver





Éste fue el último libro comprado justo antes del confinamiento, y el último que me he leído hasta la fecha, acabado hace unos días pero que aún ronda en mi cabeza, impidiéndome empezar otra lectura.

Es una obra dura, incómoda de leer en algunos momentos, que me ha mantenido no obstante pegada al libro hasta el final. Su desenlace se ofrece al lector desde las primeras páginas, por eso no desvelo nada si digo que trata sobre el tema de las masacres perpetradas por adolescentes en los institutos de los Estados Unidos, esa lacra social increíble, inexplicable y tremenda que asola el país cada cierto (poco) tiempo. Aunque Kevin y su familia son ficticios, resulta demoledor constatar cómo el río de sucesos de este tipo que se mencionan a lo largo de la novela son  tristemente  reales. 

Me ha gustado mucho el libro a pesar de su dureza, Plantea preguntas y reflexiones sobre cuestiones polémicas, como es la educación de los hijos,  el peso del amor, o de la ausencia de éste en la personalidad de los niños, las dudas de la madre antes de decidir tenerlo y sus sentimientos ante un hijo conflictivo . Como no puede ser de otra manera, el medio social está también puesto en cuestión  así como la percepción de los padres sobre su propio país, diametralmente opuesto.

La estructura del libro, de género epistolar, ofrece un desgarrador retrato íntimo de la protagonista, la madre de Kevin, cuya explicación pormenorizada de sus sentimientos lleva irremediablemente a empatizar con ella  pese a que su historia echa por tierra el modelo de feliz familia americana.

He terminado su lectura con el corazón encogido y un sentimiento agudo de desazón. Me acompaña desde entonces y será una lectura imposible de olvidar.



3 comentarios:

  1. Guau tiene que ser un libro tremendo, me le apuntó para futuras lecturas, este es el tipo de libro que sé que me va a gustar aunque ya se me encoge el corazón solo de oírte ( leerte) hablar de él.
    Un besito

    ResponderEliminar
  2. Pues me has dejado con muchas ganas. Y no era un libro que en principio me llamara la atención.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
  3. Lo leí hace 12 años y todavía lo recuerdo. Es de los libros que cada vez que hago limpieza en las estanterías nunca dono porque lo quiero conservar.
    Has explicado estupendamente lo que transmite y la sensación que deja su lectura.

    Besos.

    ResponderEliminar